Marzo 2021
(si clickais encima de las fotos se amplían solas)
El confinamiento comarcal que teníamos en Cataluña debido al covit lo iban a suavizar.
Nos podríamos mover por toda Cataluña.
Aprovecho y decido disfrutar de unos días de vacaciones que aún tenia pendiente de hacer del año pasado.
Gemma también se apunta a este mini viaje.
Preparo cinco rutas para recorrer todo el país, aunque la idea era disfrutar tranquilamente de lo que nos iríamos encontrando sin tener ninguna meta ni obligación por llegar a ningún destino.
Las motos protagonistas.
Honda 750 NCX
Triumph Explorer.
Empieza el viaje.
La salida de Barcelona al ser un día laborable, es pesada y lenta por el tráfico tan intenso que hay.
Nos adentramos en el parque natural del Montseny.
Tenemos la primera alegría, aún queda algo de nieve.
Los tramos son conocidos hasta que nos adentramos en este.
Desconocido y que acaba en el pueblo de Hostalrich.
Seguimos ruta.
Ponemos rumbo a una mítica carretera y visita obligada conocida popularmente como la carretera de las 365 curvas.
Parada en el primer mirador que encontramos para disfrutar de tremendas vistas.
El pueblo que se ve es Tossa de Mar, con su inconfundible castillo.
No hacemos la carretera entera y cogemos el desvío hacia el Massís de les Cadiretes.
Una carretera no tan emblemática, pero con ese toque aventurero que da la sensación de estar descubriendo nuevos mundos.
Estos meses de confinamiento empiezan a hacer mella y el cansancio se acumula mas de los que es habitual.
Decidimos buscar un camping.
Llamamos primero para saber si esta abierto, aún no es plena época de turismo y muchos están cerrados.
Encontramos uno.
Antes de que anochezca podemos disfrutar de unos rayos de sol reparadores.
Aunque los servicios son mínimos.
Suerte que la Explorer esta equipada con todo tipo de "lujos" y podemos hacernos la cena.
Dia II
La noche ha sido fría, mas propia del invierno que de la primavera.
Suerte que íbamos equipados adecuadamente y con el saco de invierno.
El amanecer nos regala este espectáculo.
Cargamos las motos y nos adentramos en l´Empordà.
Carreteras entre campos de cultivos.
Pueblos espectaculares.
Después de esta ruta me voy a dedicar a recorrerlos y visitarlos con mas calma.
Pueblos medievales que no salen en ninguna guía turística pero te transportan a otra épocas.
Molinos de agua.
Pasos de rio.
Rutas por descubrir, con horizontes esperanzadores.
Ríos, rieras.
Mas pasos de ríos.
A veces tenía la sensación de estar atravesando Marruecos.
Atravesamos puentes ocultos.
Canales.
Las carreteras nos llevaban hacia pueblos con una planta ejemplar.
Pasamos por el espectacular pueblo de Cadaques.
Como íbamos bien de tiempo, aunque prisa no teníamos ninguna, decidimos ir a ver los paisajes lunares del cap de Creus.
Por suerte no soplaba la Tramuntana.
Decidimos buscar un camping y vamos a uno que conocía en El Port de la Selva, uno de mis pueblos preferidos.
Pese a que estamos en la playa no deja de ser los pirineos y en cuanto se va el sol aparece el frío.
Hay para cenar sopa bien caliente.
Dia III
Nos levantamos pronto y decidimos ir a hacer un café al pueblo dando un paseo por el camino de ronda que va bordeando toda la costa.
Un pueblo que aun conserva la tradición pesquera y su lonja.
Las motos cargadas y listas para seguir ruta.
Estando por la zona no se puede desaprovechar la oportunidad de hacer la carretera que sube hasta el Monasterio de Sant Pere de Rodes y acaba en Vilajuïga.
Un monasterio que se puede visitar y desde donde sale una pequeña ruta de senderismo, entre otras, que sube hasta la cima de la montaña y hay unas espectaculares vistas de la bahía de Roses
El pueblo del fondo sigue siendo El Port de la Selva
Bajando hacia Vilajuïga.
Pasado Vilajuïga paramos en Garriguella a darnos una alegría en forma de "almuerzo motero"
Seguimos ruta por carreteras pirenaicas rozando la frontera con Francia (a ver cuando podemos volver a recorrer ese bonito país)
Paramos a descansar y hacer una toma en el pantano de Boadella Darnius
Seguimos ruta hacia unos de los santuarios que, para mi, tiene una de las vistas mas espectaculares.
La carretera para subir divertida.
Detalle de las vistas.
El aparcamiento.
Santuario Mare de Deu del Mont.
Aquí mossen Cintu Verdaguer escribió alguna de sus obras
Detalle del hotel-restaurante que hay.
Aprovechamos para tomar algo fresco con estas vistas.
Las noches son frías, pero en las horas centrales hace calor, será cosa de la primavera.
Seguimos ruta y decidimos hacer el campamento base para las próximas dos noche en Olot, un camping de unos amigos de Gemma.
Día IV
La mejor manera de empezar el día con un almuerzo mortero.
Hoy íbamos a hacer una carretera que, aparte de de que tiene cierta dificultad, es un paraíso para hacer tomas
A casi cada km una toma.
Paisajes impresionantes.
Con esa sensación de estar descubriendo nuevos mundos.
Esquivando la boñigas de vaca.
Disfrutando del entorno.
Una carretera para hacerla con calma y dejarse llevar por el entorno.
Parecía que las vacas se hubiesen sentado para vernos llegar.
La diversión pronto se acaba.
Paramos en Ripoll a tomar un café e improvisar una ruta hasta el camping donde estábamos.
Un recorrido que en línea recta son poco mas de 40 km, lo convertimos en una ruta de unos 100 km de curvas.
Terreno Exporer.
Llegamos al camping, la ducha de rigor, un paseo para estirar las piernas y preparar la cena.
Dia V
Esta noche pasada ha sido la menos fría de todas.
Al levantarme la moto solo marcaba 7º, la primera marcaba 3º.
Un buen desayuno motero.
Hoy poco que contar.
Vuelta a casa.
Gemma tenia compromisos que atender.
Hicimos un tramo de ruta juntos.
Ella siguió su destino y yo para casa.
Cataluña, un país que cuanto más lo conozco más me sorprende.
Un autentico paraíso para las motos y la gastronomía, los paisajes, playas, montañas, vinos, cervezas artesanales, turrones, deportes de aventura, tradiciones, cultura.........la lista sería interminable.
Un pequeño país donde se hablan 3 idiomas: aranes, catalán y castellano.
Gracias al covit he hecho este viaje, que al final ha sido solo una pequeña parte de lo planeado inicialmente.
Una sensación agradable y extraña a la vez el no tener que volver a casa después de cada salida.
Con ganas de repetir.
Mención especial para Gemma que, pese a que tiene cierta experiencia en moto, era la primera vez que hacia carreteras "complicadillas" y las ha disfrutado plenamente.
Fotos: Movil.
Nos vemos en la próxima
