Pirineos XIV ( recuperando la libertad )

Mayo del 2021

(si clickais encima de las fotos se amplían solas)

Por el covit hemos estado confinados, en la comarca, en el municipio, en la comunidad, en el país, en la comarca de nuevo.... 

Al recuperar algo que parece tan simple como ir donde quieras, cuando quieras y con quien quieras, te das cuenta de lo que habíamos perdido.

El no poder tomar un café o unas birras con quien te apeteciera, te hace ver como de fácil te puede cambiar la vida.

Por suerte estamos recuperando la libertad, aun queda, pero parece vamos por buen camino.

Para celebrarlo he hecho una de las cosas que mas me gustan, coger la moto, la cámara (el móvil en este caso) y  a mi mismo e ir a "mis pirineos" a intentar descubrir algún lugar nuevo y de paso respirar ese aire tan particular.

En el gps he metido todo lo que he podido escarbar en el google maps de tramos que creo no conozco.

Un pequeño tramo de aproximación y nos adentramos en el mundo de los gigantes con cuerpo de metal.

Me bajo a saludar a uno ellos y de paso tenemos una pequeña conversación.

Muy amena su conversación.

Sigo ruta.

Un tramo rápido y conocido.

No hago ninguna toma.

Aprovecho para parar a almorzar y tomar algo caliente.

Cojo un desvío y empieza lo divertido.

Uno de los pantanos que atravieso.

Empezamos a notar el olor a pirineos.

Parada para repostar.

Aunque aún quedaba medio depósito en estas estaciones la gasolina esta mucho mas barata y merece la pena parar a repostar en ellas.

Esos pueblos pirenaicos.

Nos adentramos en los pirineos.

Esos ríos pirenaicos.

Esos puentes pirenaicos.

Hace frío y viento.

Incluso en algún momento noto pequeñas gotas de agua en la visera.

No se si es por la lluvia o por la niebla.

La mañana era desapacible, de esas que apetece quedarse en casa....si no eres motero.

Esas mañanas desapacibles que hacen que el sabor de la salida sea mas intenso.

En algunas paradas para hacer alguna toma sin bajarme de la moto, agradezco el calor que sube del motor.

Los puños calefactables lo llevo puestos hasta bien entrada la mañana.

Fotos allá donde mirases.

De esos días que disfrutas tanto de ir en moto como de hacer tomas.

De este pueblo tengo un recuerdo muy especial de mi juventud.

Cascadas a pie de carretera, algo habitual en los pirineos, especialmente en primavera.

Un lago virgen y no masificado.

No voy a decir donde esta, para al menos no dar mi pequeña contribución a que se masifique.

Pueblos pirenaicos.

Este tramo era el que mas ilusión me hacia hacer pues no lo conocía en absoluto.

Me encuentro este camión.

Bajo de la moto y voy a charlar con ellos.

Han venido a reparar un poste que se había caído y están recogiendo las cosas.

Un compañero veo que baja con una carretilla por la empinada ladera "que se va a caer", "tranquilo, no se cae", esta claro que no hay nada como saber.

A mi sin carretilla ya me hubiese costado bajar por ahí.

Mientras espero hago unas tomas del pueblo que se ve.

Acaban de recoger sus cosas y sigo ruta.

Alucinado.

Atravieso pueblos que tienen ese estupendo aroma de ganado.

El aroma turístico está mas abajo.

La ruta me lleva a este pueblo, no desaprovecho la ocasión para hacer una toma, aunque la carretera se acaba en el pueblo.

Para seguir ruta tengo que volver sobre mis pasos y coger el desvío que había unos metros atrás.

Me encuentro otra cascada.

Lástima no haber traído la cámara y el trípode, la foto promete.

El asfalto de la carretera se empieza a complicar y en el siguiente pueblo que encuentro pregunto si sigue asfaltado o es tierra, "tranquilo es asfalto".

Un carretera de un solo carril, con un quitamiedos que te intenta proteger de caer al precipicio.

Sigo ruta.

Otro pantano.

Me estuve pensando en cruzar este puente, aguantó.

Hago una parada para recuperar fuerzas.

Y ya un "to recto" para casa.

Esta ruta la he vivido con una intensidad diferente.

Quizás el covit nos haya enseñado a disfrutar mas intensamente lo que tenemos.

Quizás nos ha enseñado a apreciar lo afortunados que somos por poder ir a donde queramos, como queramos, con quien queramos....

Una salida de unos 650 Km desde Badalona.

Nos vemos en la próxima.