Octubre 2018
(si clickais encima de las fotos se amplían solas)
Tanto por el frío como por las lluvias que salían en todos los pronósticos del tiempo, hoy iba a ser el primer día verdaderamente otoñal.
Y lo íbamos a aprovechar acercándonos al bonito pueblo medieval de Santa Pau a hacer unas fotos.
La lluvia sería la protagonista.
Después de buscar aparcamiento me acerco a una de las panaderías del pueblo a comprar un recién hecho croissant.
Doy buena cuenta de él y empezamos el paseo por el pueblo.
Este es uno de los miradores y desde aquí sale un camino para ir al pueblo, pero es un camino de tierra y con la lluvia hay mucho barro.
Decido dar un rodeo y entrar por las calles del pueblo.
Enseguida aparecen las primeras fotos.
Llego a la plaza mayor pero es imposible hacer ninguna foto, está llena de coches aparcados.
Me pierdo por las estrechas calles colindantes.
La lluvia y la niebla.
Es difícil aguantar el paraguas con una mano y con la otra el móvil.
Al final me ingenio un apaño para aguantar el paraguas con la chaqueta y tener las manos libres.
Hay tomas por todos lados.
Sigo paseando por las calles estrechas y solitarias.
De vez en cuando me cruzo con algún vecino, aunque procuro que no salga en la foto.
Aquí estuve un rato esperando que una señora atravesase todo el porche para hacer la foto.
Los rincones se iban sucediendo.
Uno...
tras otro.
Una de las puertas de salida de la muralla.
Esta puerta parece mas improvisada.
Vista por un lado.
Vista por el otro lado.
Un tranquilo y apacible paseo bajo la lluvia.
Dos tomas del mismo lugar.
Estamos en una zona volcánica.
Aunque no se vea por la niebla, por aquí hay un volcán.
Si no recuerdo mal el nombre es el de Santa Margarida.
Hay un paseo para llegar hasta él que seguro volveré en otra ocasión que no llueva para darlo.
Aunque de la impresión que resbale mucho la calle, subí sin ningún problema.
Una foto que me hizo gracia.
Otra puerta de la muralla.
El otoño a través del cristal.
Un bonito paseo.
El invento que utilizaba para aguantar el paraguas con la chaqueta y así tener las manos libres consiguió que acabara con la cabeza empapada.
La tela del paraguas se apoyaba en ella.
La calefacción del coche lo solucionó en seguida.
Volveré un día de otoño o invierno que no llueva para hacer alguna de las rutas que hay indicadas a pie, en especial la del volcán de Santa Margarida.
Un pueblo que merece la pena visitar.
Aunque no salgan en las fotos hay variedad y cantidad de bares, restaurantes, hoteles por si apetece pasar el fin de semana.
Todas las fotos están hechas con el móvil.
Nos vemos en la próxima
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarUnas fotos muy bonitas como siempre, gracias por compartirlas.
ResponderEliminarGracias a ti por leerla.
EliminarMolt maques totes les fotos, tot i que tu i jo no pensem el mateix a l'hora de treure una persona a la foto, sempre es pot fer d'esquena i li dones un toc humà.😉
ResponderEliminarAferradetes de pluja, avui.
Gracias.
EliminarEl tema de sacar personas o no en la foto (se entiende que no sea la persona el motivo principal de la foto) es un tema muy debatido.
Hay quien opina que si y hay quien no.
Derecho a la intimidad personal/derecho a la libertad de expresión en lugares públicos.
A mi no me gusta que me saquen en las fotos si no doy mi consentimiento, aplicando la misma regla, yo no saco a nadie en las fotos si no es con su consentimiento.
En algunas crónicas de este blog salen personas que antes les he pedido su consentimiento.
De hecho me cuesta mas tomar fotos donde no salga nadie (a veces muchos minutos de espera), que buscar una buena composición con personas.
Pero como todo en esta vida "depende del color del cristal con que se mire" (ya lo dijo un gran escritor y poeta, no es cosecha mía).
Aferradetes y sigue haciendo tan buenas fotos como hasta ahora.