sábado, 14 de mayo de 2022

Bodegas Modernistas ( II Quaternaraider )

 Mayo 2022

(Si clickais encima de las fotos se amplían solas)


El formato de Quaternaraider cada vez me gusta mas.
A veces necesitas algo mas que hacer km´s solo por hacer km´s.
En esta Quaternaraider había que hacer una ruta uniendo varias bodegas de la época modernista.
Para saber el funcionamiento de las Quaternaraider´s clickar aqui.
La ruta que hice no era larga, decidí no poner el despertador.
No salí muy temprano, ese sería el motivo por el que me encontré mas tráfico del que es habitual en nuestras salidas.
Primero de todo repostar en una gasolinera de bajo precio.
La gasolina se ha convertido en un producto de lujo.


Luego a buscar la primera bodega modernista.
Foto de rigor.


Mientras buscaba la entrada de la bodega veo una panadería/pastelería.
Después de la foto vuelvo sobre mis pasos para buscar algo para desayunar.
Compro también un trozo de coca de cebolla.
Coca que intuí que estaría buenísima, pero que dejó un tremendo olor a cebolla en el cofre.
Cada vez que lo abría recibía una enorme bofetada de cebolla.


Sigo ruta rodeado de viñas.


Llego a la siguiente bodega, que también es museo del vino.
En varias de ellas a parte de vino también venden aceites, cavas y productos artesanos.


Sigo ruta y sigo rodeado de viñas.


Llego a la siguiente bodega.
A la entrada del pueblo veo otro edificio que también parece una bodega, paso de largo y me paro en el de la foto.
No tengo claro cual de los dos es.
Lo mejor entrar y preguntar.
La chica que lo atiende, muy amable, me dice que si, que estoy en la bodega modernista, el otro edifico lo han dejado como almacén.
Voy  a hacer la foto y se para una furgoneta de reparto.
No me queda otra que sonreír bajo el casco y mover la moto para poder hacer la foto, el coche no me veía capaz de quitarlo.


Sigo ruta, viñas, muchas viñas.


Llego a la siguiente bodega, parece en desuso o no tiene tienda de venta al publico, como no encuentro a nadie para preguntar, las dudas no las puedo disipar.


Sigo ruta.
Carreteras fáciles.
Un estupendo día para ir en moto, aunque ya empieza a apretar el calor, suerte que ya he salido en modo verano de casa.


Me encuentro carteles como el de la foto en varios pueblos, cada uno con la denominación de origen correspondiente.


El gps me hace una de las suyas y me lleva a un pueblo donde termina la carretera.
Según el gps la carretera sigue, pero es una pista y parece en muy mal estado.
Paro a ver como volver atrás y seguir con la ruta prevista.
Después de unos cuantos quiebros consigo seguir la ruta.


Llego a la siguiente bodega.
Esta parte está en la carretera principal y poco mas fotográficamente se puede hacer.
La parte de atrás a simple vista parece interesante, pero por algún motivo la carretera de acceso la han cortado al tráfico  y no puedo pasar con la moto.
Decido dejar la curiosidad para otra ocasión.
Aún me queda ruta.


Siguen las carreteras fáciles y divertidas.


Llego a la última bodega de la ruta, no a la última bodega modernista, hay mas, pero para esta Quaternaraider solo escogí estas seis al azar, sin ningún motivo especial.
Detalle de la fachada.


Esta bodega está en una calle secundaria y puedo recrearme haciendo fotos y buscando planos.
Hasta me da tiempo a esperar que llegue el tractor para que le haga compañía a la Explorer.


Quaternaraider completada y de vuelta a casa.
Encuentro un lugar donde lavar la moto, que buena falta le hacía.
Esta mañana debo haber pasado por una nube de moscas o mosquitos que habían dejado la pantalla llena de puntos negros, unidos a los que ya tenía daba una imagen singular.
Parecía una moto con acné, en plena adolescencia.


La estadística del viaje.


Por cierto la coca de cebolla buenísima, aunque no se cuanto tiempo tardará en irse el olor a cebolla del baúl.
Seguiré haciendo Quaternaraiders, me gustan.
Fotos: móvil.
Nos vemos en la próxima.






No hay comentarios:

Publicar un comentario